La vida es como el pelo.

La vida está llena de cosas que no podemos predecir, que no podemos detener que pasen, al igual que la caída del pelo, sólo se cae, y ves el pelo tirado en el suelo, como el momento que pasó. Pero existen productos para que el pelo se caiga menos (sigue cayéndose, nada lo podrá detener, ¿el cuero cabelludo lo quizo así?), y existen formas para aunque sea cambiar la manera de ver el momento, y no pensarlo de manera negativa, sino reflexionar sobre el asunto y entender que las cosas pasan por algo, y no hay que arrepentirse (¿el destino quizo que eso pase así?).

Cuando la vida va transcurriendo diferentes momentos, algunas forman parte del pasado, de lo antiguo, y están viejitas, frágiles. Puede ser que un mal momento del pasado, siga influyéndote en el presente. Entonces es hora de cortar esas puntas quebradas, secas, para que el pelo crezca más fuerte y sin dejarse influir por lo pasado. El pasado, ya pasó. No te vas a olvidar de esas puntas chamuscadas, pero es hora de ponerle un fin, para dejar lugar a que nuevos recuerdos tomen su lugar, a nuevos momentos por vivir, y que las raíces estén bien firmes.

A veces, el mismo color de pelo, el mismo corte, terminan aburriendo. Cuando te mirás al espejo, ves siempre lo mismo, puede ser que a veces más inflado que otras, o mejor peinado, pero siempre lo mismo. Con la vida pasa lo mismo, hay veces que la rutina cansa, siempre levantarse a la misma hora, hacer las mismas actividades, y todos los días lo mismo. Y aunque un día te pudiste encontrar un billete de $10 que hizo que tu rutina cambie, termina siendo siempre lo igual. Entonces, ¿Qué esperás para ponerle a tu vida un poco de rubio, castaño, colorado, o hasta verde? ¿ Y si cortás la vida en capas, la rebajás, o la cortás carré?.

Y cuando la vida va poniéndose vieja, se lo comunica al pelo para informarle que ya no es lo que era antes, que todo lo de antes fue hermoso por supuesto, y no significa que lo de ahora no lo sea, pero simplemente ya pasó y es hora de demostrarlo, por eso se pone canosa y finita. Se pone cortita, todos los ancianos tienen el pelo corto ¿no?, demostrándote que la vida se está agotando, que ya no crece fuerte como antes, que es mayormente todo frágil y que hay que aprovecharlo porque no sabés cuando se pueda llegar a terminar de desaparecer.